El reencuentro

"Y no digas nada" es lo que me dice Mario.

Quiero irme de aquí, cambiar de Universidad, de lugar y sitio. Quiero alejarme de esta región, quiero ir a otro lugar, la península, pasar inadvertida. Pero el riesgo es mayor, y sabemos algo más, pero...es tan triste que tú novio no fuese lo esperado, o lo que creías....no es que fuese infiel una vez, se ve que se compartía con todas...bueno, al menos, con 3, y 2 son mis mejores amigas... No puedo estar más aturdida, asombrada, enfadada y triste... Porque no se lo puedo recriminar.... Y sí, las dos conducen...

Hemos quedado a tomar un café tras las clases. Lo solemos hacer, pero hoy me siento diferente, por el mal humor que está noticia me ha generado. Son las 19 horas y bajo, cuando vienen a buscarme. 

- Qué ganas tengo de un té con vainilla- dice Cristal.

- Ay si, yo el de nata con fresas, y podríamos jugar a un juego...- comenta Laura.

A atrevimiento o verdad, pienso yo.

- Y tú, ¿cuál quieres?

- Si, yo sólo té rojo. Quizás pruebe el que lleva canela también.

Sí, se que estoy vigilada, y justamente, qué curioso, Lidia es una de esas policías que estarán a mí vera. Ya la he localizado, saludando con la cabeza. Hace ser una pareja con un policía. Entran al mismo café que nosotras.

- Pues sl final lo he dejado con David- nos dice Cristal.- Se ha liado con otra este fin de semana, me lo ha contado y pedido perdón, pero no...

- Chica, sí son 9 meses y sólo un fin de semana distanciados... A ver, no es acto a hacer, pero con lo mucho que te quiere...y si te lo cuenta y está arrepentido...- intenta convencerla Laura, que es muy pro continuar si hay amor, pase lo que pase.

- No, no es digno de perdón. Eso es portarse mal. Y no hay solución.

- Claro, como si tú siempre fueses la que nunca lo ha sido...- exclamó, sin remedio.

Lidia, al lado, lo escucha. Me hace un guiño, no es lo que procede, pero noe he podido resistir.

- ¿Perdona? ¿Crees que hay que perdonar una infidelidad tras nueve meses de relación? No soy como otras- me dice Cristal.- No soy como tú, que lo aguanta todo...

- ¿Que no eres como yo en qué?¿Qué he hecho yo?- pregunto, indignada.

Lidia y su pareja nos miran.

- Perdonar todo, a cambio de regalos, cines y comidas en restaurantes...

- ¿Perdona? Creo que no sabes que mi pareja murió asesinada...- le digo llorando.

- Ya, tu pareja que actuaba en el porno y tú te hacías la despistada, siempre, como una niñata enamorada, a cambio de todos esos lujos....- reprocha Cristal.- Voy al baño.

Se levanta y va al aseo. Estoy estupefacta. La que tendría que ir soy yo, no ella. Y no sabía nada de actuaciones en pornografía....

- En serio, se ha pasado, pero ya dirás, no me digas que no querer nunca hablar del tema... Madre mía, es que pareces tonta...

- Perdona, pero, ¿qué es eso de actuaciones en porno? 

-¿No miras los GIFs en internet? Madre mía, si hay una web sólo de él actuando con muchas chicas, se forraba con eso... ¿No lo sabías?

- No. ¿Y tú sí...?

- Ay, como eres. Si todas las del grupo estamos allí. Cobré 700 euros por cada sesión... Nos la pedían los clientes, y 1000 € por las que hicimos en vivo...

La pareja de Lidia está escuchando. Mi móvil, grabando. Yo, aturdida. Veo que Lidia va al baño, y me estraña que Cristal no haya salido aún, por mucha necesidad que tuviese, ya son 15 minutos que lleva allí, mientras Laura me cuenta lo que ocurre...

De repente, la voz de Lidia...

- ¡Está muerta!