Mario

- No me lo puedo creer, ¿por qué no lo dijiste antes?

- Recibí un escueto mensaje, y llamé por la noche, tras la segunda declaración de Marga, está vez con vosotras.

- Laura lo sabía...

- Laura sabía que Marga es positivo porque son amigas, pero no tiene por qué saber más. No creo que mienta, no oculte nada.

- No, ya no. Supongo. Laura siempre ha sido más sincera conmigo, creo que la persona que más lo es,.

- Te olvidas de mí.

- Perdona, era respecto a la gente con la que iba, he ido, estos años.

Mario y yo convivimos con mi familia. Ahora ya si, después de esto. Mis parientes están agradecidos. Es como un hermano mayor, aparte de vigilante, policía, guardaespaldas. Y es gay. Ya me lo ha confirmado, tras hacerle algunas preguntas como:

- ¿Como se llamaba tu novia? Me dijiste que se fue a estudiar a otro sitio.

- Javier.

- Ah.

También hay más alarmas, y algunos policias vienen a visitarnos casi cada día, por si hubiese problemas. 

Tras dos días encerrados, en los que he vuelto a teñirme de un color parecido a mi rubio natural, hoy me sugiere salir a pasear. Estamos en época de vacaciones y no hay clases, y, tras jornadas de estudio, charlas, pintura (sí, estamos pintando en unos libretos dibujos agradables, como animales, paisajes, edificios...) y programas de televisión y cine. Ahora no quiero alejarme de la realidad ni llorar tanto. Y doy gracias por estar sana. Caminando por el centro comercial del Fan, con más protección de lo esperado, suena el teléfono, antes de entrar en Deichman. 

- Un momento. Me llaman.

Callo. Le comentaba mis preferencias. Veo su cara.

- ¿Qué ocurre?

- Acaban de encontrar el cadáver de  Marga.